Porque los pensamientos no se leen, primero se escuchan, luego se escriben, y entonces sì, se leen.

martes, abril 29, 2008

Aunque bonito, el verde nunca sienta bien


Me topé con un artículo llamado algo así como '100 escritores mexicanos menores de 31 años'.
Ahí estaban una bola de nombres que me resultaban desconocidos, pero que después, al mirar de cerca, algunas palabras nominativas me fueron familiares. Revilla por ejemplo y López, por ejemplo.
Me di a la tarea de revisar todos los blogs que se mencionaban (que no eran los cien, eran un tanto menos).
Los busqué para medirme. Para resolver una duda que siempre me da al conocer a alguien, digamos, 'realizado'. ¿Quién era este güey a mi edad?. Esto siempre con la finalidad de decir, 'mira, si no la llevo tan mal' o lo que muy probablemente encontraré 'no, pues con razón está donde está'.
Para empezar hay quienes, por puro nombre y apellido, se encuentran en el lugar correcto por pura estética y fonética. Ahí está por ejemplo Enrique G. de la G. o Ivi May Dzib. Entonces ya de entrada el 'Jaime Rodríguez' suena un tanto cotidiando comparado contra esos dos.
Después está el uso del blog en sí. Unos creyéndose líderes de opinión (porque no sé si lo sean), exponen sus opiniones e ideas acerca de los más diversos temas, teniendo o no razón, pero eso sí, muy bien escrito; todo en su lugar, sin palabras de más o de menos. Luego, hablan de música. Tema en el cuál llevo desventaja cronológica, de al menos 4 años, dado que la gente normal empieza a escuchar y aprenderse canciones a los 12 y no como yo que empecé a los 16 (y sin aprenderme canciones enteras aún), además claro está de mi naturaleza sorda; física y artística, que queda evidenciada al confesar mi gusto por la canción sigue bailando - de Latins.
Hubo alguno que sí me gustó, uno de una tal Mariana Martínez, donde hablaba un poco de sus pensamientos personales durante la vida y en primera persona, y no como alguno otro que leí en donde el autor se fotografió con un poster pro-comunismo en el fondo, y que en sus letras defendía al peje; y no estoy diciendo que tanga algo de malo defenderlo, pero el cliché es tan, pero tan mamón...
Y aún siendo mamón y su pose de intelectual, y su obvio narcisismo, el tipo escribe re-bien.
No era de sorprender el que algunos se elogiaran a sí mismos en dicho artíulo, como ya me venía esperando de Oscar David López, al cuál me presentó Paloma vía sus letras hace ya tiempo atrás, y que se vanagloria ahora de no hablar inglés y sin embargo estar siendo traducido a ese idioma.
Hasta el odiado Revilla, al cuál había despreciado la otra vez, leí con atención, para descubrir sentido común, con lo que mi odio se redujo bastante y casi a nada cuando confesó además su gusto por los Simpsons. Y como dijo el padre de Rulo en la misma serie "Perdimos ante el mejor..."
Después viene el yo, con esto que huele a humildad y a lo que mi querida Lester Jenny diría 'No sea tan humilde Pollo'. Con un blog que comenzó por plasmar mis viajes e impresiones sobre ellos y que ahora no es más que mis desvaríos cotidianos, que muchas veces medito en lo saludable del asunto, porque en más de una ocasión he releído lo ya escrito y me encuentro con temores que había olvidado, pero que emergen con la memoria de las letras. Letras que en sí reflejan cada vez más la monotonía por la que paso y que intento minimizar al buscarle siempre tres pies al gato.
En cambio aquellos, con idas y vueltas, con porros algunos, con alcohol otros, con pequeños cuentos erótico-sadomasoquistas como anécdotas personales, con escritos, con libros, con orgullo, con estima, vamos, con una vida con la que se les siente realizados.
Y yo aquí, con esta tonalidad verde que no combina nada con mi playera azul.

domingo, abril 27, 2008

Icaro

No sé cuando es que lo pensé. Pero lo pensé. "¿De donde viene la estupidez?". Y yo creo que aquella duda provino de algún niño (y cuando digo niño, hablo de 10 años de desarrollo) de los que atendía en la tienda, y que de alguna manera no lograba entender algo tan secillo como una orden "Sientate aquí" "-¿Donde-?" "AQUI" . Y claro, no aplica exclusivamente a terceros, por que yo mismo he hecho cosas de las que después me pregunto "¿Por qué lo hice?" cuya contundente respuesta es única "Por idiota".


La verdad es que no sabía como responder la pregunta que me había planteado, pero siempre me quedó la duda.


En una de mis visitas a Samborns para comprar algún librillo que me llamara la atención, me topé con un título desafiante "El que no lea este libro es un imbécil" de un tal Oliviero Ponte. Lo tomé para analizarlo. Y en el pequeño resumen de la contraportada se describía '...un ensayo sobre la estupidez a través de 565 citas...".


Lo compré como buena víctima de la mercadotecnia y el libro no logró satisfacer mis dudas.


Esta pequeña introducción es el conector de un comentario que me llamó la atención en una conversación ayer en la noche "... si los niños no tienen suficiente proteína de entre los dos y los seis años, se quedan tontos, su capacidad de aprender ya no será igual...". La verdad es que mis conocimientos médicos a estas alturas de la vida y a siete años de distancia, no me daban para corroborar la afirmación, pero la tomé por cierta por provenir de una persona ilustrada y porque el comentario era parte de una larga letanía de un proyecto de Vegemite para San Luis y que prevenía precisamente la falta de la proteína a esta edad a través de dicho alimento.


Así pues la estupidez finalmente tenía cierta explicación.


Esto alivió de alguna forma mi coraje que tenía hacia un tal reverendo Adeliz Antonio de Carli, que en un acto de completa estólidez, decidió atarse mil globos de helio y volar por los aires al menos por 19 horas, que es que pa' recaudar fondos.


Los resultados hasta ahora son los esperados, el cura está desaparecido, y solamente se han encontrado restos de globo por aquí y por allá. "Algo anda mal", fue lo último que se le escuchó decir por la radio. Y yo creo que no era 'algo' lo que andaba mal, sino 'todo'. ¿A quién se le ocurre?. Más increíble aún ¿Qué no hubo alguna voz de sensatez que dijera 'Disculpe su mercé, con todo el debido respeto pero yo creo que es usted un pendejo a punto de hacer una pendejada".


Al parecer no la hubo, porque el padre se elevó a los cielos bendiciendo a todos aquellos que se reunieron para despedirlo entre aplausos.






martes, abril 22, 2008

San Marcos 2008


En Grosvernor (conocido casino de mala muerte de South Kensington), llegué a ganar lo suficiente en la ruleta como para comprarme mi camarita de fotos que tanto me gusta, eso sin mencionar que salíamos bien cenados gratuitamente.

Ahora que fuimos con la misma idea a la nacionalmente famosa cantina 'Feria de San Marcos', para enriquecernos en el casino, y meternos en los bolsillos lo necesario para el ya muy pensado viaje a Acapulco (que comenzó invitando a las chapanecas, y que ahora se cambió a Vallarta y sin chapanecas), acabó por ser de lo primero un bello recuerdo de lo que sucedió en lo segundo.

Llegamos demasiado temprano al casino, por lo que nos quedaban seis horas por delante que matar. No se nos dificultó nada vaciar una pata entera entre tres en el transcurso de dicho tiempo.

Para cuando llegamos al casino, cosa extraña, nos sentíamos un poco mareados. El dinero salía de los bolsillo, de las carteras, de las botas, de los zapatos, de los brasieres. Nunca había visto a tanto mexicano despilfarrar algo que por lo general no nos sobra.

Cuando mis sentidos ya habían vuelto en sí, tuve la sensatez de retirarme en tablas, y así poder salir los dos restantes fines de semana del mes.

Fuimos a cenar antes de ir a dormir, y desgraciadamente para mi que me deleita comer, caimos a unos tacos que solo puedo calificar como 'gachos, bien gachos, de hecho los más gachos de la historia de los tacos'. Sobre todo, porque Gustavo (nombre del puesto, y supongo del taquero), a decidido revolucionar la industria de la comida chatarra al agregar dos ingredientes más a la tortilla y la carne. Puré de papa y frijoles. Que cosa más pinchurrienta.

El mal sabor de boca me duró incluso aún dormido en el coche.

sábado, abril 19, 2008

!No me digas!, ¿Mató a un gato?




Así pues el dinero que guardaba bajo la almohada, y que cariñosamente llamaba "Mi escape a Londres", ha sido puesto en una nueva aventura. "Todo fuera como el dinero...", sí, pero que difícil es hacerlo cuando allá va tanta ilusión.

De alguna forma me ayudó a desviar mis pensamientos del desaire amoroso por el que pasé, al final pues no era para tanto, pero bueno, un desaire es un desaire, y ya lo superé.

Ahora pienso en eso precisamente, ¿que es lo que le falta a uno?. Cuantas ganas de pedirle a la susodicha, por favor siéntate y explícame. No para decir, 'eso lo puedo cambiar', sino por saber. Es una curiosidad tremenda, ¿qué hice mal?.

Habrá muchísimas cosas que no le cuadren, pero entonces supongo que habrá por lo menos una, a la que definitivamente no se le puede hacer de la vista gorda. Porque igual cuando uno escoge a alguien, hay cosas que no te gustan, pero las pasas por alto, sin embargo, hay requerimientos indispensables; habrá quienes no puedan andar con una más alta, o a quien no le guste que su novia sea guadalupana. En base a esa suposición mafufa, me pregunto ¿Cuál es ese pico en la gráfica que me destaca (para mal)?.

Será que se me nota mucho la ansiedad que a veces se me trepa, o el que hable solo, o tratar de corregir algo que me está distrayendo mucho (el cruce de brazos de ceci por ejemplo), o que cuando manejo más bien voy como pichón de iglesia dando vueltas y vueltas hasta ubicarme, o será lo peludo, o lo distraído, o mi memoria caprichosa, o a lo mejor mis cuentos, o mi gusto por los malabares, o mi sueño güajiro de ser trotamundos, o mi muy brutalmente bruta honestidad, o el que me quede mirando al vacío sin razón aparente, o el que me ponga triste depués de jugar fútbol...

En fin, son muchas cosas, pero me da curiosidad saber cuál, aunque no sirva de nada, porque todo aquello alguna vez lo traté de corregir, y me di cuenta de que no se podía, que me viene por naturaleza.

martes, abril 08, 2008

Un chapuzón al baúl de los recuerdos




El primero de los proyectos a fracasado a manos, bueno a palabras, de un tal Revilla. Me cago en todas sus flores.


Los otros ahí van, espero que no tenga que cagarme en aquellas flores también.


También con la que me hacía ilusiones y por la cual me dejé la barba larga, ya también me botó.

Luego vienen esas preguntas que me caen tan gordas "¿Y por qué no tienes novia pollito?". Como si por alguna razón se les olvidara la posibilidad que tiene cualquier hijo de vecino como yo de ser bateado a lo profundo. Pero en fin... ando un poco mala leche el día de hoy.

Acabo de leer algo que me vino como anillo al dedo, y de alguna forma me levantó el ánimo. A veces la miseria de alguien más es un perfecto consuelo.






Lo mejor de toda la semana fue el poder dar con el nombre de aquella película que tanta ilusión me hacía de niño. The phantom tollboth. Hay otras claro, que las pienso y se me ilumina la cara por traerme recuerdos de aquellos años mozos. Robin Hood (la versión de Disney), las de Indiana Jones (ya quiero ver la nueva), las de Terence Hill y Bud Spencer (que ganas de pegar como ellos a un montón de tipos), Simbad el marino, Flash Gordon,las aventuras del barón Munchausen.... que ahora que las nombro me explico varias cosas, pero bueno... por hoy sigo fastidiado, sobre todo para desenmarañar traumas y sus consecuencias.






martes, abril 01, 2008

!Ay mamá!




Nunca un mes ha tenido tanta importancia para decidir un cambio grandioso... o en su defecto, para desilucionar a niveles que pudieran tocar el ego.