Porque los pensamientos no se leen, primero se escuchan, luego se escriben, y entonces sì, se leen.

domingo, marzo 23, 2008

Buscando el significado de Nza


El correo común y corriente es usado para... pues la verdad es que ya no sé para que se usa, pero sigue vigente, rústico y arcaico, pero vigente.

Yo, lo uso actualmente para albergar esperanzas. De muy distinto índole todas ellas pero que igual viajan dentro de sobres y con estampillas.

Me dio por enumerar cuantas veces he guardado esperanza, y estas se han cumplido. No pude recordar ninguna.

¿De que están hechas pues las Esperanzas?. Habrá algunas que estén fraguadas y terminadas a base de carne y hueso. Hablan, piensan, interactúan, alguna hasta tendrá novio. De estas no conozco a ninguna. Mejor creo yo. Sería terrible tener una decepción de alguna Esperanza de esta clase, y además, sería difícilisimo meterla en un sobre, primeramente por el tamaño del sobre, y secundariamente porque casi la puedo oir '¿Por qué me metes en un sobre?'. Dudo mucho que se deje ensobretar y mandar, por lo que a lo mejor la tendría que mandar en cachitos o medio noqueada, y ya con tanto daño, dudo que dicha Esperanza me cumpla. Así que no.

Luego, si en vez de hacer cachitos a la persona, lo hacemos con la palabra, nos encontramos con que esperanza, está compuesta por la palabra 'espera' y 'nza'.

La primera, es imperativa, nos ordena que nos detengamos y dejemos pasar el tiempo. La segunda, no tengo la menor idea de lo que quiera decir.

Es ahí donde está el problema, como con toda esperanza, uno tiene que esperar; 'aún tengo esperanza...' de que la situación cambie, de que suceda algo, de tantas y tantas cosas que a uno no le toca otra más que cruzarse de brazos. La parte mágica de la esperanza es cuando sucede aquello a lo que nos estábamos aferrando, en este caso esa parte es la llamada Nza. Nza pues, significará la fortuna con que las cosas sucedan o no sucedan.

Ahora bien, la fortuna y la suerte, son cosas que algunos indican como falsas, ya que son resultado de las leyes de probabilidad.

Cocluyo por lo tanto que una esperanza es una representación de conceptos probabilísticos en términos formales—esto es, en términos que pueden ser considerados separados de su significado. Estos términos formales se manipulan con las reglas de la matemática y la lógica, y cualquier resultado entonces se interpreta o traduce de nuevo al dominio del problema.

Con lo que tenemos que una esperanza de resultado positivo o negativo, no es más que una interpretación del problema final , es decir, no soluciona nada.

No queda más que tener la esperanza, de que Nza, no sea capricho de la diosa suerte, sino más bien, la cosita que uno siente en el pecho cuando espera una respuesta.

miércoles, marzo 12, 2008

Las voces perseguidoras


Rosario, mayo de 1969


- Los premios son siempre una metáfora - dijo el Gordo mientras echaba aceite a las cebollas.

Roberto y Jorge, sentados en una mesa del fondo del Costa Brava, lo miraban y se preguntaban cómo era posible que tuviera esa habilidad para pertenecer y no pertenecer al mismo tiempo.


-Gordo y tu putísima madre ¿metáfora de qué?!


-Kawabata me cae bien…¿van a querer pepinos? y sigo pensando, es un desperdicio que un tipo como vos no escriba en algún lado...


-¡Sí, con una ametralladora me voy a poner a escribir yo! alucino con tus razonamientos, Capdevila...¿qué carajo querés que me ponga a escribir? ¿te parece que las cosas están para hacer literatura? a veces no te entiendo, enserio...


Jorge estaba callado y miraba el teléfono con insistencia. Eran las once y media de la noche y no era exactamente en el bar donde tenía que estar. Se le había ido la mano y otra vez llegaría tarde a su casa. Muy tarde.


Georgina Rôo


No suelo echar mano de fragmentos tan grandes que no me pertenezcan. Pero ese fragmento salió del blog de Georgina Rôo, a la cual por supuesto pedí permiso y me dio su autorización. Me llamó la atención (y lo publico aquí), por tener una bizarra conexión con mi contexto. Nombres y ambiente. Hasta tuve la misma sensación de cuando conozco a personas que tienen los mismo ademanes que alguien más. Es como un miedo reprimido. Es raro.

sábado, marzo 08, 2008


Como delatan las anteriores entradas, traía cargando una pesadez mental.
Me subió el ánimo la llamada de mi amiga Giselle.
Giselle, porque pocos la conocen, es una psicóloga de 28 años que conocí cuando trabajaba en L'eclair, y ella en la florería de al lado. Para los que la conocen de aquellos tiempos sabrán que yo me portaba muy mal con ella. Posiblemente de las pocas personas que he tratado de la patada intencionalmente.
Con el tiempo y no sé bien como nos hicimos amigos.
De vez en cuando nos vemos y vamos al cine, al café o por un trago, generalmente al centro. Esas salidas siempre se basan en tratar de destripar el uno al otro desde dentro hacia afuera. Que si estoy frustado, que si ella está reprimida, que si su pasado, que si mi futuro. Es una competencia no oficial, de tratar de ver quién toca la fibra más profunda, con la pura intención de elevar nuestros egos a costillas del otro.
Pero la llamada del otro día no fue así , fue un genuino trazo de amistad. Ver como estaba y buscar consuelo con algunos problemas que ella tenía, yo escuché y también dejé salir alguna que otra cosa que me tiene mareado.
Me sentí bien pues. Posiblemente por que al ser una enemiga íntima, esta vez nos hayamos quitado los sombreros y dieramos tregua para ver si el rival sigue estando en condiciones de ser pisoteado psicológicamente.

lunes, marzo 03, 2008

Run, run hace el coche.






Nos fuimos a León al rally, como ya se ha vuelto tradición. Esta vez fuimos toda la banda que ya desde hace tiempo atrás se reune para compartir copas, críticas y humor. Leto, Mauro, Chino, Ever, Fido (su primera vez), Sebas, Ponchito, Rosbesto, Pollo.


Todo muy bien. Muy divertido. A destacar varias cosas, sin embargo los detalles no son públicos; con decir que parte del soundtrack del viaje fue el finísimo grupo Marrano.


En fin.


Por increíble que parezca, me dio tiempo para pensar muchas cosas.


El odio que estoy sintiendo por algunas personas del trabajo, mi situación actual, mis planes, mis envidias, mis complejos, mi persona.


Hasta sentí ganas de regresando a San Luis ir a San Francisco a la iglesia. Cosa que parecera rara, dado que como bien saben no soy a fin a la religión, pero como muchos desconocen, era un lugar que frecuentaba mucho después de que salía de estudiar con Barbosa.


Me sentaba a veces hasta una hora. Me gustaba mucho el frío que se sentía dentro, como de mosaico. Era entretenido porque siempre había gente. Ambiente triste el de la iglesia. Gente con sus rosarios en mano, o incadas, o rezando, o nomás balbucenado súplicas, siempre con ojos vidriosos o de plano con una lágrima rodando. Y a echar la imaginación al aire. ¿Que le pasará aquel? ¿Por qué pedirá aquella?.


Esta vez quería ir, porque por alguna razón me acordé de un maestro de historia de secundaria. Ismael. También por razones que sólo mi caprichosa memoria sabe, recordé que nos contó como una vez se metió a la iglesia por pura 'inercia'. Y estando ahí viendo la figura de una virgen, está volteó la cabeza para verlo.


Tenía ganas de que me pasara eso. No para buscar la vuelta a la religión, ni siquiera por atizar la ya magullada fé, sino por creer que las cosas pueden pasar. A cuenta de que lo mismo que ya había comentado. Necesidad de saber que algo va a pasar. Porque de pronto me parece que no, que estoy estancado. En léxico colombiano 'Tenaz'.