Habitantes de una nube

Hacìa dos años que no pisaba un palenque. La ùltima vez que fui, habìa sido con Caco, Tere y Cano. Regresè asì, dos años despuès, al mismo show.
Se sentìa el obvio vacìo que dejò Caco, pero a la vez, me parece haberlo visto por ahì, igual que siempre, alegre y jocoso.
La memoria, y probablemente màs la mìa que se ganò su independencia hace rato, juega triquiñuelas, que no sè si agradecer o maldecir, porque los recuerdos emergen tan vivos, tan reales, que a uno se le opaca un poco la visiòn. Aunque se hace muy seguido, fue bueno recordarlo, por esta vez, de una forma distinta.


Estoy ampliamente decepcionado de mis nulos dotes administrativos, ya que al entregar cuentas como responsable de las tiendas, hubo un deficit de dinero. "Asì que asì serà el resto de mi vida..." pensè. Y es que eso de ir contra natura, no deja nada bueno. Yo debì estar relacionado con el arte, pero por peras, manzanas, melocotes, limones y alguna que otra sandìa, me fui alejando de ese mundo del que soy parte apenas por las letras que desparramo aquì y allà. Y ni siquiera asì me siento parte de el, me siento màs bien como un intruso, haciendo gala de un mimetismo excepcional, parecido al de las malditas 'e' s.


Comienzan a aterrizar varios proyectos. Londres (otra vez), España. Pero como me acaba de decir Donahì que decìa el niño "¿Quieres hacer reìr a Dios?, ve y cuentale tus planes". Y aunque Dios y yo, no nos hablamos desde hace rato, la frase me hizo gracia. Sì, es verdad, el futuro no es màs que un sinònimo de lo incierto. Ahì està Pedro el santo, fue el mejor discìpulo, y ¿quièn se lo hubiera imaginado?, ahora le toca chambear por la eternidad como portero. Si alguien se lo hubiera dicho entes. JA. Lo cual me lleva a pensar en Jesucristo, cuando le decìa "Nombre Pedrito, tu eres mi consigliari, la neta, mi brazo derecho aqui en la tierra", mientras pensaba "Nomàs deja que llegues al paraìso y veràs lo que te toca por haberme negado tres veces...".


Kikis me dijo que dadas las irregularidades de mi "informe" en la tienda, le prometiò al santo Antonio, trece monedotas si aparecìa el error. Pobre Antonio, mira que haber vivido, me imagino, una vida dedicada al pròjimo, como para que todavìa se le moleste en el paraìso, !y con dinero!, eso si que es una bofetada en la cara. Casi puedo oìr lo gritos desde alguna nube lejana. "!Los milagritos son totalmente altruistas, y poniendome de cabeza no se consigue novio, !salte de la iglesia y ve a un antro hija mìa!....bueno...tu sì hijita, resale harto, porque va a estar cañòn que salgas...".
Yo de pasada, le agradecerìa si encontrara la repuesta a una pregunta "¿Porque mi mamà insiste con la sopa para comer?"