Día # 1

A partir de hoy me voy a obligar a escribir una entrada diaria. Esto pues, puede aburrir al lector que venga a husmear estas letras, que ya la verdad han perdido mucho interés, dado que mi aventuras se han reducido mucho, pero lo hago como ejercicio de escritura pues, y muy ultimadamente ni explicación debería de dar.

En fin.

Lo primero que quiero escribir es acerca de lo incómodo que está siendo el que la gente me llame por mi nombre en el trabajo. Tantos año de escuchar 'pollo', y ahora así de sopetón, el otro nombre, con el cual me siento muy poco relacionado; en todo caso lo relaciono con papeleo y trámites. Así que el ir por la vida escuchando ahora eso, es como si de alguna forma me hayan puesto en un marco. No sé, es raro pues, me siento incómodo.

Toda mi memoria se vincula a ocasiones donde 'pollo' hacía algo, y no el otro, el nombre formal, el de las listas de asistencia y el complemantario a la palabra 'cual'.

Así pues mi personalidad (si es que la hay) se está tornando en algo bizarro, que como dije el otro día analicé y no me agradó. Muchas aristas que hay que pulir, y de las cuales no tenía conocimiento, como la nueva paranoia que traigo ahora. Por las mañanas me da un delirio por repasar lo que dije el día anterior, y muchas veces sentir cruda moral. ¿A cuento de que me da remordimiento haber dicho algo?. Generalmente me metía en problemas por mi brutal sinceridad, pero ahora siento un poco de culpa al día siguiente. ¿Habré adquirido un poco de conciencia?. Guacala. Eso hasta se escucha como si hubiera 'madurado'. Pero luego tampoco, yo nunca me he considerado maduro (y de hecho creo que nadie me considera así), pero entonces ese sentiminiento ¿que festaja?. Ese no soy yo. Pero ahí está, como cuando en los sueños ves un físico de alguien que no corresponde a la persona que 'sabes' que es. Un amigo con el físico de un actor, o un pariente en el cuerpo de un animal. Es por eso que ahora me miro al espejo con cautela. Hasta me dieron ganas de re-leer a Alicia con aquello de :

"I wonder if I've been changed in the night? Let me think. Was I the same when I got up this morning? I almost think I can remember feeling a little different. But if I'm not the same, the next question is 'Who in the world am I?' Ah, that's the great puzzle!"

o también

"I can't explain myself, I'm afraid, Sir, because I'm not myself you see."

Pero bueno, al final del día cuando la ansiedad se trepa demasiado, tomo aire y me pongo a recordar a mi buen amigo Chimes que solía canturrear aquello de "Todo pasa y todo queda...", que muchas veces pensé era su filosofía de vida.